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Viviendas. La casa redonda. Galicia.

Tres episodios de la serie documental de Televisión Española "Arte y tradiciones populares" sobre la casa redonda de Galicia y su evolución desde los castros a las pallozas. Los episodios, emitidos en 1.984, tienen una duración de alredor de quince minutos. A la calidad de la serie se suma el valor de testimonios e imágenes de hace más de tres décadas.
Orígenes de la casa redonda. Los castros. 

Programa dedicado a los restos de castros celtas de muro circular en piedra y tejado de paja.

La cultura castreña, iniciada a finales de la Edad del Bronce y desarrollada plenamente durante la Edad del Hierro en el noroeste de la península ibérica, comenzó a ser influída por la cultura romana a partir del siglo II a.C., mezclándose con ella desde la conquista hasta el siglo III d.C, con ejemplos tardíos durante la ocupación sueva, en el siglo V. Su economía era agrícola y ganadera, complementada con caza, pesca, además de minería, metalurgia y cerámica.

 El castro de Santa Tecla, en Pontevedra, está datado entre los siglos I a.C y I. d.C, con el proceso de romanización ya comenzado, aunque mantiene la tipología constructiva de cabañas exentas de planta circular u ovalada, con apenas excepciones, y muros de mampuesto -de 40 cm de espesor medio- directamente apoyados sobre roca y recubiertos con mortero de cal y arena. Algunas tenían adornos geométricos en jambas y dinteles y muchas, un vestíbulo de acceso. En el interior había bancos adosados y suelo de tierra pisada o losa. Se cubrían con vigas de madera que descansaban en los muros, sin poste central, y con una geometría que no se conoce con seguridad y que podría ser la de tejados de paja a dos aguas, cónicas o planas.
La casa redonda. Pallozas de los Ancares.

Programa dedicado a las pallozas existentes en varias aldeas de la sierra de Los Ancares, como  Vilarello o Piornedo, dos pequeños núcleos situados en los pastos más altos del monte.

La palloza es la vivienda tradicional de la montaña gallega, de planta circular, muros de mampuesto y tejado de forma cónica hecho de colmo. Sirve como vivienda, almacén y establo.

Las palloza de esta zona son de planta circular o elíptica, con gruesos muros de unos 2 m de altura, de mampuesto de granito asentado en seco y escasos y pequeños huecos. La cubierta se forma con una techumbre de colmo cuya estructura de vigas de madera se apoya en uno o varios pilares del mismo material, llamados esteos, de unos 7 m de altura, y en el muro perimetral. Su distribución interior está condicionada por su construcción en la ladera, reservándose el nivel más alto a la vivienda y el más bajo al establo. Las divisiones se hacen con madera. La zona vividera se articula en torno a un amplio pasillo central, llamado astrago, al que abren uno o dos dormitorios y los cortellos, pequeños establos para las crías del ganado. su ensanchamiento en el centro forma el lar o zona de estar, próximo a la entrada interior al establo. En otro artículo se estudiará este tipo de edificios con más profundidad.
La casa redonda. Pallozas de O Cebreiro.

Programa dedicado a las pallozas de Cebreiro, aldea de los Ancares Lucenses, a 1.330 m de altitud y primer pueblo de Galicia del Camino Francés, a pocos kilómetros al sur de los anteriores pero con un trasiego de personas que impulsó las relaciones sociales frente a la tendencia al aislamiento de las anteriores. La iglesia prerrománica de Santa María (sg. IX) es el núcleo en torno al cual se ordena la población.

Las pallozas de Cebreiro, mayores que las de Vilarrello y Piornedo, son de planta oval o elíptica truncada y tienen muros de mampostería de pizarra con una altura media de unos 2 m. En los casos de planta elíptica, algunos muros son de una altura considerablemente mayor para adaptarse a la forma de la cubierta, que está realizada con un estructura de vigas de madera   apoyada en el muro perimetral y en los muros interiores que sustituyen los esteos típicos de otras pallozas y que hacen su distribución algo más compleja que la del resto, con algunas dependencias separadas con dichos muros de mampuesto y otras con divisiones de madera.

Como cubrición se emplea el colmo, un sistema que utiliza manojos de paja de centeno atados, mediante cuerdas, a los elementos horizontales de un subentramado hecho de varas de madera que les sirven de apoyo